jueves, 22 de abril de 2010

las tres pruebas...




Un hombre que se acercó a Sócrates le dijo: -“¡Como soy muy amigo suyo, necesito contarle algo!”

-“¡Espera!”, dijo Sócrates. “¿Y las tres pruebas? ¿Ya hiciste la primera prueba, que es la de saber que lo que me vas a contar es verdad?”
-“Bueno... no tengo una certeza absoluta, pero oí decir...”

-“Entonces hiciste la segunda prueba”, dijo el sabio. “La prueba de la bondad. ¡Lo que vas a contarme será bueno para mí!”
-“No... muy por el contrario...”

-“Si no hiciste la prueba de la verdad ni la de la bondad, ciertamente habrás hecho la de la utilidad. ¡Lo que me vas a contar me será útil!”
-“¿Útil?”, dijo el visitante. “Bueno, útil no es.”

-“Entonces”, dijo el filósofo sonriendo, “si el asunto no es verdadero, ni bueno, ni útil, mejor no le des importancia.”